domingo, 13 de octubre de 2013

Pelota de tenis

La camarera, con los labios pintados de rojo, se inclinó sobre la barra y le coqueteó al cocinero, el apuesto joven le respondió guiñándole un ojo, lo que provocó que el café se quemara en la cafetera y que el taxista que iba a tomarlo se demorara media hora más en regresar a las calles.
La chica con el vestido corto no encontró taxi, pues el que normalmente seguía su ruta no apareció, tuvo que caminar hasta su local y la florería que abre a las diez, vendió rosas hasta las once.
Un chico que pasaba por ahí se detuvo un minuto (¡sólo uno!) a preguntarse por qué seguía cerrado el lugar; mientras una chica caminaba hasta la esquina pensando qué camino tomar, se detuvo en el cruce de las avenidas, como una pelota de tenis al golpear la red, quedándose, durante una fracción de segundo, suspendida en el aire, con la posibilidad de irse a uno u otro lado, así estaba ella cuando decidió irse a la derecha.
y ahí, frente a un local por coincidencia  cerrado lo conoció a él.

a veces tenemos miedo de admitir el papel que tiene la suerte en nuestras vidas.


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¡Totalmente inspirada por la película Match Point (que muero por terminar de ver) y Benjamin Button! Siento mucho haber estado tan ocupada esta semana, pero como ya les había dicho estoy en exámenes, aunque me ha ido bastante bien. (Inserte la voz de alguno de mis compañeros idiotas diciendo: MATADA). Anyway, todavía tengo pendientes un TAG y el video de una canción que me gusta, pero hoy (después de la batalla campal que tuve con mi computadora) me apeteció escribir algo más. Ya casi es mi cumpleaños y he recibido algunos regalos que ¡uf! me han sabido a gloria, quizá porque los anhelaba muchísimo: Wonderstruck, unos tenis para correr, unas botas, dinero (que me voy a gastar en artículos de papelería, se los juro que no hay nada que me haga más feliz) bufandas y bolsas. Ningún libro, pero se los paso porque las novelas del siglo XIX no son tan fáciles de encontrar. Tengo muchos proyectos, muchos pendientes, muchísimas ganas, me quiero comer al mundo entero.
Rosy, si estás leyendo esto: ¡felices 18! en una semana te alcanzo.
Soy feliz, quien sabe por qué.



Una mandarina que habla
Come to the wild side with me 

5 comentarios:

  1. Me alegro de que te sientas tan contenta!!! y que te haya ido bien en los exámenes... Y precioso ese relato :)
    Un beso :)

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  2. ¡Dios! Es curioso como cualquier detalle o gesto hace que todo cambie. Las casualidades existen y es lo que poco a poco crea nuestra vida.
    Besos

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  3. Muchas Felicidades, muy bonito el relato, asi nos sentiomos muchas veces todos creo yo.
    Te invito a pasarte por mi blog, tengo un concurso activo por si gustas.
    Te sigo.
    Besos.

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  4. Me encantó el texto. Es verdaderamente real como cada pequeño detalle conforma nuestro destino. Y me alegra que seas feliz. Creo q lo mejor de eso es que no sepas el porque. Asi jamas se arruinaría. Saludos!! Gracias por tus comentarios!!

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  5. Esa película es puro amor, me la pusieron en clase de ingles y te desconcierta de tal manera que el final no podría ser tan especular si no se tratara de ese director que rompe todas las tendencias del cine formando una propia y exclusiva como la de WoodyAllen ^^
    PD: El texto precioso. ;D
    ¡SE MUY FELIZ! :):)

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